La insólita idea se llevó a cabo en Austria. “Es muy bueno para la piel y es una experiencia de vida”, afirmó la dueña de esta utopía, hecha realidad hace nada menos que 15 años, pero abierta al publico en los últimos días.
Si lo que buscaban era llamar la atención, lo lograron. Y lo hicieron el crear una fuente de cerveza, la cual en principio no era para cualquiera, mientras que ahora el acceso a las aguas de esta bebida espirituosa, es para todos.
Hace 15 años nacía el bar “Starkenberg Brewery”, ubicado en Tarrenz, en el seño de una familia austriaca, la cual disfrutó de los beneficiones de la cerveza, al bañarse en ella, y ahora comparte sus vivencias con quienes deseen visitarlos y sumergirse en esta experiencia.
Los dueños y anfitriones del estableciemiento, aseguran que el olor de esta bebida es reconfortante, pues es fuerte y está en todos lados.
Además, recomiendan a sus clientes no ducharse luego estar un tiempo en la piscina y dejar que los nutrientes sigan en el cuerpo, esta su eliminación natural.
“Es muy bueno para la piel, y es una experiencia de vida”, afirma Andrea Stigger, la dueña.