Gaston es un joven de Villa Gobernador Galvez, parte de un grupo de graduados que desde enero tenían contratado un salón de eventos en Villa Gobernador Galvez, para festejar su colación y al llegar se encontraron que el lugar no estaba preparado.
“Tres horas antes de la graduación, una compañera va a llevar los centros de mesa y cuando llegó no había nada en el salón. El dueño le dijo que no tenía plata, que se había gastado todo en el casino y no podía armar el festejo” relató el joven que aseguró que les habían abonado 75 mil pesos en cuotas.
Además Baez remarcó que “cuando quisimos hacer la denuncia, no se la tomaron porque el lugar no está habilitado como salón de fiestas. Al final para no perder el día, y sacarse el mal trago que habían pasado, los jóvenes decidieron festejar igual con lo que había, con una fiesta organizada a medias y sin servicios básicos.