Un joven de 17 años saqueó 600 euros y un secador profesional y lo sentenciaron a tomar un curso de estilista de nueve meses en España. Al finalizarlo, deberá comprobar que aprendió o tendrá que ingresar a un centro de menores.
Granada Emilio Calatayud, juez de menores, condenó a un joven que robó 600 euros y un secador de pelo profesional de una peluquería a tomar un curso de nueve meses y cortarle el pelo cuando lo termine en España. La sentencia fue porque cree firmemente que la educación es la base de todo.
“Yo estoy en manos de los profesores, serán ellos los que decidan si aprueba”, explicó el juez. Si el joven supera el examen final habrá cumplido su condena. En el caso contrario, será castigado por desobediencia y tendrá que ingresar en un centro de menores según publicó Catarmarcaya.com.
“No me cortaré el pelo hasta junio, que es cuando termina el curso, así que tendrá que demostrar sus habilidades. No hay que ponérselo fácil”, precisó el juez a la prensa de Granada.
Según Calatayud “muchos menores cometen delitos, pero no son delincuentes. Lo que hacemos es acompañarlos a madurar”. El juez sabe de qué habla, en su juventud fue internado por su familia en un correccional de Campillos (Málaga).
“La sentencia que más me duele dictar es condenar a chicos de 17 años a aprender a leer”, dijo el juez. “Menos mal que los hemos atrapamos robando, si no saben ni leer” , agregó. “Lo que más te agradecen es que los condenes a estudiar”.
Al principio, el fiscal lo condenó a cien horas de trabajo comunitario pero como el adolescente confesó que quería ser peluquero cambiaron la sanción y lo sentenciaron a aprobar el curso de estilista.
“Es lo que yo les digo siempre: como no has estudiado por lo civil, vas a estudiar por lo criminal”, contó a Europa Press el magistrado que en 2015 recibió la Medalla de Andalucía por su manera de entender y aplicar la justicia.