Con su mudanza, Sánchez Jáuregui convierte al bloque del FdT en la primera minoría de la Legislatura.
En diálogo con el diario LA NACION, la referente de la Unión Argentina de Trabajadores Rurales y Estibadores (Uatre) aseguró que no se siente “una traidora”, como la acusaron, ya que no encontraba una puerta para el diálogo donde se encontraba. “Nos trataban como los negritos de Juntos por el Cambio”, lanzó.
“Que ser cobarde no valga la pena”, le dijo el diputado de Pro Waldo Wolff, en un mensaje de Twitter, y encendió la polémica. La legisladora bonaerense, por su parte, se defendió: “Sería traidora si traicionara los principios de defender a los trabajadores que represento, a los ciudadanos de la provincia de Buenos Aires”. Además, sostuvo que los tuits no le generan nada en especial porque vienen de personas que no la conocen y que nunca les dieron lugar dentro de la coalición.
“Sigo pensando que el dialogo y los consensos son el camino. Me gustaría que, en vez de mandar trolls a agredir, pudieran pensar en qué se equivocaron. Tal vez me denostan porque yo sí me sentí orgullosamente bonaerense”, reflexionó Sánchez Jáuregui, e insistió en que su tarea siempre fue “representar trabajadores”.