Un episodio insólito y preocupante tuvo por escenario una clínica privada de la capital catamarqueña, luego de que los médicos se equivocaran de pierna al momento de realizarle una amputación a una paciente de 90 años. El hijo de la anciana, Zenón Javier Chaile, acudió a la Justicia de Catamarca para denunciar que personal médico de un centro asistencial local amputó la pierna derecha de su madre cuando en verdad había que hacerlo sobre la izquierda.
Autorizados por su hijo, los médicos que asistían a la paciente llevaron a cabo la operación quirúrgica. Sin embargo, al concluir la intervención y aunque el estado de salud en general de la paciente era bueno, por motivos que se desconocen y son ahora investigados por la Justicia, se descubrió que los médicos le habrían amputado la pierna equivocada a la paciente.
La mujer ingresó a la sala de operaciones y “al despertar se dio cuenta de que le habían amputado la pierna equivocada”, señaló su hijo, quien decidió denunciar el hecho y acudir a la Justicia para que caiga la pena correspondiente sobre el grupo médico que intervino en la operación.
El director médico del centro de salud, Roberto Gómez, salió al cruce de la denuncia y confirmó que la intervención a la mujer se debía realizar en ambas piernas, versión distinta a la que sostiene el hijo de la mujer intervenida. “Es una paciente de 90 años, la cual tiene trastornos atróficos en ambos miembros inferiores con infecciones, con obstrucciones severas. Es una paciente que está postrada desde hace mucho tiempo, con una posición fetal, y hace 30 días se le había indicado la amputación de ambos miembros”, sostuvo el facultativo, quien desestimó que la operación involucraba una sola pierna.
Luego de escuchar el relato del denunciante, los efectivos policiales pusieron en conocimiento del hecho al fiscal en turno, quien impartió las directivas a seguir. Según trascendió, el fiscal habría solicitado al personal judicial que se constituyera en el centro de salud privado y secuestrara la historia clínica de la paciente, así como también todo tipo de documentación que pudiera ser relevante para la investigación del caso.
Además, se trabajaba en la recepción de testimonios que pudieran echar luz en la pesquisa. Un marcado hermetismo rodea al tema, ya que no trascendió el nombre de la paciente y de la clínica sólo se sabe que está ubicada sobre la calle Mariano Moreno, en la ciudad de Catamarca.