El presidente Alberto Fernández analizó con los gobernadores de las provincias y el jefe del Gobierno de la ciudad de Buenos Aires la situación sanitaria del país con vistas a la nueva etapa del Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio (ASPO) dispuesto a causa de la pandemia de coronavirus.
El jefe de Estado, quien escuchó la opinión de los gobernadores por videoconferencia desde la Residencia de Olivos, estuvo acompañado por el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, y los ministros de Salud, Ginés González García, y de Interior, Eduardo “Wado” de Pedro.
En la reunión también participaron la secretaria Legal y Técnica, Vilma Ibarra, y el secretario General de la Presidencia, Julio Vitobello.
La etapa actual del aislamiento vence el próximo domingo, por lo que se espera que en las próximas horas las autoridades nacionales, provinciales y municipales anuncien las características que tendrá la nueva fase de aislamiento o distanciamiento social.
En ese contexto, el gobernador bonaerense, Axel Kicillof, se reunió con intendentes e integrantes del Comité de Expertos para analizar la situación epidemiológica en su distrito y abordar las posibles modificaciones con vistas a la próxima etapa del aislamiento.
El gobernador dijo que su administración “seguirá trabajando en base a protocolos estrictos” y autorizando la reapertura de actividades según “la fase en que se encuentre cada municipio” por la pandemia de coronavirus.
Kicillof escuchó las recomendaciones de los especialistas y repasó las cifras que dan cuenta de una reducción en los casos positivos y de la utilización de camas en el sistema hospitalario, e hizo hincapié en la situación más compleja que afronta el interior de la Provincia, de acuerdo a lo consignado por voceros oficiales.
Asimismo, el mandatario dialogó con los jefes municipales y coincidió en que “las actualizaciones y habilitaciones en el marco del aislamiento social, preventivo y obligatorio debido a la pandemia de coronavirus deben estar fundamentadas en las mejoras epidemiológicas”.
El gobernador destacó “la necesidad de reforzar el cumplimiento de los protocolos”, y anticipó que “cada lunes se irán definiendo las fases y, con ellas, las diferentes actividades que pueden realizarse en cada distrito”.
El mandatario bonaerense hizo estas declaraciones tras la reuniones en las que también estuvieron presentes la vicegobernadora Verónica Magario; el jefe de Gabinete, Carlos Bianco; los ministros de Salud, Daniel Gollan; de Gobierno, Teresa García; y de Producción, Ciencia e Innovación Tecnológica, Augusto Costa; y el viceministro de Salud Nicolás Kreplak.
El ministro de Salud bonaerense afirmó que “estamos en una meseta alta y con un aumento en el interior” y dijo que “los indicadores prácticos que estamos mirando son los llamados al 148 en los centros de telemedicina (CETEC), la cantidad de casos, la utilización de camas y los testeos”.
El ministro de Producción bonaerense, por su parte, se refirió a la actividad turística y explicó que “se trabaja coordinadamente con el Gobierno nacional y con los distintos municipios que reciben turismo de temporada”.
El Gobierno porteño, en tanto, analiza para la nueva fase del ASPO la vuelta de la actividad de las empleadas domésticas, la reapertura de los shoppings y el acceso a los salones de los locales gastronómicos, mientras que ratificó la propuesta para el regreso presencial a clases.
Fuentes del Ejecutivo de la Ciudad señalaron a Télam que el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, planteará al Gobierno nacional un plan con las nuevas medidas para el distrito, que serían anunciadas antes del fin de semana.
Las mismas fuentes manifestaron que la reapertura de los shoppings se realizaría con protocolos similares a los utilizados en supermercados y se restringiría el número de personas que pueden ingresar.
Respecto de los locales gastronómicos, el Gobierno porteño busca habilitar la atención de comensales en el interior de los mismos, ya que actualmente solo pueden hacerlo en el exterior.
El 18 de septiembre pasado, el Gobierno extendió el ASPO hasta el domingo 11 de octubre y había advertido entonces que “la pandemia no permite descuidos”, aún cuando “la ciudadanía comienza a relajarse” y pese a que los casos de coronavirus continúan creciendo en la mayor parte de América.