El equipo de Anfield es uno de los más laureados de Europa, pero nunca había logrado consagrarse campeón del mundo. Luego de vencer por la mínima a Flamengo en tiempo extra, lo obtuvo.
Luego de vencer 1-0 a Flamengo en Qatar, dejó atrás una serie de desencuentros y derrotas.
El equipo de Anfield tiene seis consagraciones continentales y esta fue su cuarta final. En 1977, el conjunto inglés se negó a jugar la Copa Intercontinental ante Boca, que se consagró tras vencer a Borussia Mönchengladbach, subcampeón de aquella edición de la Copa de Europa. En 1978 debería haberse medido nuevamente ante el Xeneize, pero un desacuerdo en la coordinación de las fechas hizo que el título quedara vacante.
Recién en 1981 Liverpool disputó su primera final, cuando ya era tricampeón europeo. Su rival fue justamente Flamengo, que lo goleó 3-0 y se subió a la cima del mundo por única vez. Tres años después, su verdugo fue Independiente, que se impuso por 1-0 con el histórico gol de José Percudani.
Ya en la historia más reciente, los Rojos ganaron la Champions League en una final inolvidable ante Milan en 2005 y viajaron a Japón a jugar el primer Mundial de Clubes (tras la edición inicial de 2000). Allí, llegó a la final y esta vez sucumbió en manos de San Pablo, que ganó 1-0 en Yokohama.
Este 21 de diciembre, Jurgen Klopp y los suyos hicieron historia. El esfuerzo que demandó jugar tiempo extra y enfrentar a un duro rival valió la pena: una vieja herida fue cerrada.