“Las palometas están todo el año en aguas de la zona. Durante el periodo de calor los peces incrementan su metabolismo, por lo cual requieren más alimento. Es por ello que las palometas, están más activas, procurándose alimento cuando más se eleva la temperatura del agua”, explicó Danilo Demonte, integrante de la Dirección General de Manejo sustentable de los Recursos Pesqueros del Ministerio de Ambiente y Cambio Climático.
“Los humanos solemos ingresar a su ambiente, en momentos donde están más activas, cuando la temperatura ambiente es mayor”, continuó Demonte y agregó que: “Es común que se acerquen a lugares donde hay ruido” debido a que “consiguen comida” y se produce la “aglomeración de potenciales presas”.
Las palometas “forman parte de los animales que pueblan el Paraná. Son cazadores y también carroñeros, funcionan como limpiadores de los restos de otros peces o animales que flotan en el río, lo cual ayuda a evitar que se acumulen cuerpos en descomposición en el sistema”, explicó el técnico del Ministerio de Ambiente y Cambio Climático.
“Se desaconseja ingresar al agua, en cuerpos de agua donde se hayan producido mordeduras, ya que un nuevo ataque es esperable, sobre todo si la temperatura ambiente se incrementa”, finalizó Danilo Demonte.