Una mujer encontró un clavo oxidado en una hamburguesa que pidió en un local de comidas rápidas. Lo peor del caso es que, lo notó cuando ya había lastimado su boca. Indignada, denunció a la compañía aunque hasta el momento, no ha tenido respuestas.
Todo ocurrió el 20 de junio pasado, cuando Miriam Alegre paseaba junto a su hijo por el Shopping Avellaneda. En el patio de comidas, ella optó por un combo del local American Favs. Después de cuarenta minutos de espera, recibió su pedido. Como estaba frío, se acercó a los empleados y les pidió que calentaran la hamburguesa.
“Cuando me llevé el sandwich a la boca sentí algo que pinchó mi paladar: era un clavo oxidado”; contó en diálogo con Crónica. Entonces, regresó al mostrador e informó a los empleados lo ocurrido. Pero el personal a cargo no se hizo responsable del error, aunque sí le devolvieron el dinero abonado.
Miriam entonces, decidió denunciar lo acudido ante la UFI descentralizada N°3 de Avellaneda por “posible delito de acción pública”. “Desde American Favs dicen que no tienen ningún tipo de responsabilidad. Lo vinculan con negligencia de sus empleados, aunque la compañía debería responder por lo que hacen ellos”, indicó Martín Narducci, abogado de la mujer. “Ahora, el único camino es el reclamo civil por daños y perjuicios, y el penal para comprobar esos daños”, agregó.
