El pequeño murió en 2017 víctima del “síndrome del bebé sacudido”, un conjunto de lesiones producidas por el zamarreo.
Un hombre quedó detenido el miércoles pasado en Córdoba acusado de haber matado a su hijo sacudiéndolo violentamente. El bebé murió víctima del “síndrome del bebé sacudido”, un conjunto de lesiones producidas por el zamarreo.
Gonzalo Gambero, de 33 años, llevó al su hijo Pedro al Nuevo Hospital San Antonio de Padua la tarde del 22 de agosto del año pasado, pero los médicos no pudieron hacer nada por él, informó el sitio La Voz.
El bebé de tres meses y medio estaba en paro cardiorrespiratorio y no presentaba reacciones cerebrales. Murió pocas horas después por lesiones que fueron producto de una “violenta sacudida”.
Los médicos que trataron al bebé notaron que no había sido una muerte natural e instaron a los padres a hacer la denuncia y tras 10 meses de investigación Gambero quedó detenido el miércoles pasado.
Los peritajes que sirvieron como pruebas en su contra llegaron a Córdoba esta semana, pero en su indagatoria del viernes pasado se abstuvo de declarar.
Gambero habría sido la última persona que vio al bebé con vida, un par de horas antes de que se descompensara.
Las lesiones que provocaron la muerte de Pedro serían concomitantes al trauma: el cuerpo del pequeño exhibe una “tríada” de hematoma subdural, hemorragia retina (en ambos ojos) y edema cerebral.
Esas lesiones son características en el “síndrome del bebé sacudido”. El cerebro de los bebés y los chicos de corta edad aún no ocupa toda la caja craneal por lo que se daña si son zarandeados de manera violenta.
