La fiscal Valeria Haurigot que había dado positivo el test de alcoholemia cuando manejaba su vehículo finalmente no recibirá una sanción.
El hecho ocurrido el primer fin de semana de abril desató gran polémica al tratarse de una funcionario del Ministerio Público de la Acusación. El auto que conducía fue detenido en un operativo en Funes. Haurigot tenía 1,2 gramos de alcohol por litro de sangre en el examen que le hicieron cuando el máximo permitido es de 0,50.
Este viernes el jefe de los fiscales de Santa Fe, Jorge Baclini, aclaró que adoptó esta resolución ya que “la ley orgánica del Ministerio Público de la Acusación no tipifica este tipo de faltas leves “.
“Lo que no puedo hacer es faltar a la ley, debo respetar la legalidad. Yo ahora estoy reglamentando la norma para en el futuro aplicar sanciones para faltas leves, pero no puedo aplicar una sanción no contemplada en la norma ante una conducta no tipificada“, destacó en diálogo con La Ocho.
Asimismo destacó que Haurigot “no intervendrá en casos de accidentes viales con homicidios culposos” que podría involucrar a personas que hayan tomado alcohol.
