Una mujer despechada es capaz de hacer cualquier cosa y el mejor ejemplo se vio en China, cuando la engañada que descubrió que su marido le era infiel y descargó toda su furia contra el vehículo de su pareja.
Para romper el auto utilizó una maza, y no le tembló el pulso a la hora de abollarle todas las puertas, el capot y hacerle trizas todos los vidrios.