El capitán del seleccionado argentino se prepara para dejar atrás un año en el que fue clave para que el equipo nacional llegara a la final del Mundial, además de marcar 58 goles en 66 partidos.
Barcelona cerró el año con una goleada por 5 a 0 ante el Córdoba y Messi, aún sin haber protagonizado una destacada actuación, apareció sobre el cierre del partido para despacharse con dos exquisitos goles anotados con su pierna menos hábil.
Tras este último encuentro, los jugadores quedaron liberados para tomarse vacaciones.
Ante esto, el capitán del seleccionado argentino no demoró en tomarse el primer avión para reencontrarse con los suyos y pasar los días festivos en su Rosario natal.
La Pulga retrató el feliz momento y compartió su alegría en las redes sociales.