La reunión de la comisión de Salud del lunes 16 de septiembre se realizó en el anexo Arturo Umberto Illia. Presidida por Lisandro Zeno, del Partido Demócrata Progresista, estuvo integrada por Roberto Sukerman, del Frente para la Victoria-PJ; y Agustina Bouza y Agapito Blanco, de Cambiemos.
Obtuvo despacho un proyecto de la intendencia que incorpora la figura del manipulador de alimentos y remplaza a la anterior libreta sanitaria, según modificaciones de la ley nacional. También indica que los trabajadores en esa función deberán realizar cursos de capacitación.
A pedido de Bouza, quedó en estudio una iniciativa de Norma López, del FPV-PJ y demás ediles del interbloque Frente Nacional y Popular, para que el Departamento Ejecutivo “gestione incremento excepcional del monto asignado a la tarjeta única de ciudadanía”. El expediente ya obtuvo opinión favorable en la comisión de Gobierno y también deberá ser tratado en Presupuesto y Hacienda.
En la reunión se le dio proveído favorable con pase a Planeamiento y Urbanismo a un mensaje de la intendencia para que se permita el funcionamiento de un gimnasio en el subsuelo de San Lorenzo al 1000, donde se localiza el hotel Savoy.
Problemática del autismo
Luego de escuchar a padres de niños con síndrome de TGD, los ediles propusieron elevar un pedido de informes al Departamento Ejecutivo.
El objetivo de la solicitud es reclamar el cumplimiento de la ordenanza 9.633 que fue aprobada en 2016 y prevé un abordaje integral e interdisciplinario del autismo en los servicios de salud municipales.
En el encuentro de este lunes, Celeste González Toralbo cuestionó que “a nivel local no existan dispositivos de atención”.
Los padres explicaron que sus hijos son asistidos a través del dispositivo El Ángel, que funciona en el Hospital de Niños Zona Norte, dependencia provincial. “Somos 40 familias con atención y 26 que están en lista de espera. Por eso, cuando los chicos cumplen los 10 años tenemos que darle lugar a otros”.
En el mismo sentido, Jorge Bustamante explicó que “es el único centro que brinda alguna cobertura para afectados por TGD en toda la provincia”.
“Nosotros esperamos que desde la salud municipal se les de atención a nuestros niños y a nuestras familias. Se trata de un síndrome que es difícil de detectar y muchos pediatras lo pasan por alto, y hasta nos dicen que nuestros hijos son caprichosos o los consentimos cuando aparecen fobias en la alimentación”, señalaron.
“Sabemos que los servicios están desbordados y el sistema de salud colapsado, pero no queremos que nuestros hijos queden cada día más olvidados”, expresaron.