“Son todas maniobras de Duran Barba que manejan todas estas tácticas insólitas”, dijo sobre las denuncias contra empresarios y funcionarios. Calificó la situación actual como similar a la “última etapa de Fernando De la Rúa”.
El juez de la Corte Interamericana de Derechos Humanos y ex Ministro de la Corte Supremasostiene que con la denuncia de coimas que realizó un chofer del ex secretario de Energía Roberto Baratta “se está tratando de tapar algo sumamente grave”.
“Estas cosas distraen la atención, en este momento se mira para otro lado, pero la realidad es que económicamente estamos en una situación verdadera penosa y catastrófica. Son todas maniobras de Duran Barba que manejan todas estas tácticas insólitas”, sostiene el penalista que dejó el máximo tribunal en 2015.
Para Zaffaroni, “lo que está fallando es la dimensión económica. Creo que estamos consumiendo el tanque de reserva de dólares. Estamos en un momento muy análogo a los pasos seguidos en el 2001. Esto se parece mucho a la última etapa de Fernando De la Rua”.
En declaraciones a Radio 10, el autor de más de 25 obras de Derecho Penal explicó que “la fotocopia no es un documento, es un medio que se puede falsificar tranquilamente. Se detiene a una persona cuando realmente hay una semiplena prueba, de lo contrario no. Puede haber patentes, domicilios, un serie de datos pero es no es indicador de un delito”.
Se refiere a la denuncia por la que el juez Claudio Bonadío detuvo a varios empresarios ligados a las obras públicas realizadas durante el kirchnerismo. Se basó fotocopias de anotaciones que hizo un chofer de Baratta llamado Oscar Centeno en ocho cuadernos. Cuando le preguntaron dónde estaban los originales, el arrepentido dijo que los quemó en su parrilla.
“Las fotocopias se pueden tomar como una indicación de los datos consagrados en el documento y hay que verificarlos”, concluyó Zaffaroni.